miércoles, 22 de octubre de 2008

33 Dias en la sala de espera ( tres poemas)

Ya falta poco.

Ya falta poco, ya falta poco para que mi cabeza no haga
Otra cosa que pensar en ti. Ya falta poco para estar cerca
De ti, de llenarme de melancolía por la noches preguntándome
A quien tendrás en tu cabeza.

Ya falta poco para que tu madre me niegue tu presencia. Ya
Falta poco para que tenga esta gastritis crónica cuando estés
Por venir. Ya falta poco para que me destrocen los nervios.
Ya falta poco para verte, ya falta poco. Pero para ser más exactos
Faltan once meses.
F.R.H junio del 2006
------------------------------------------------------------------------------
Bella.


Eres bella, porque de algún modo me lo dicen tus ojos, tu ombligo, tus manos y las uñas de tus pies.
Bella, ahora te tengo cuando estoy en silencio. Cuando sueño. Cuando me muero por ratitos en la noche.
Quiero hacerte el amor, bella. Chuparte el pezón, oler tus cabellos y moverte con mi cintura a las maneras dóciles del amor.
Bella, te recuerdo todas las putas noches, por eso me niego en aceptar que la memoria encuentre caminos de regreso donde están, el pasado y la nostalgia.
A veces exagero en pensar que eres única. Vete al diablo, bella.

F.R.H 24 de mayo del 2007---------------------------------------------------------------------------------------

A las tres de la tarde.

Mi cuarto es la capsula perfecta para escapar del mundo y sus complejos, de quitarme la camiseta de la caminata de no encontrar nada. El eco de las canciones intenta huir, pero se encuentran con las cuatro paredes que asemejan una caja de sorpresas que espera ser descubierta.

Hojas y cartas sin buzón nadan por el piso, mientras dos sillones son las islas a las que nunca vendrás. Náufrago en mis sueños, en mis ilusiones y siento que estoy más triste que la muñeca despeinada y sola que se quedó abandona en mi cuarto.

Sin pilas cómo mi reloj y no hay mensaje oculto en mi puerta que me anime el corazón. ¿Por qué no vienes? Aunque sea un rato. Procurándote volverte a ver y es que olvidarte es físicamente imposible. Y me pregunto ¿Porqué tengo calor?








F.R.H Un día a las tres de la tarde.

No hay comentarios: