domingo, 9 de noviembre de 2008

Amor se llama el juego

Hace demasiados meses que mis payasadas no provocan tus ganas de reír.No es que ya no me interese, pero el tiempo de los besos y el sudor. Es la hora de dormir.
Duele verte removiendo la cajita de cenizas que el placer tras de si dejó, mal y tarde estoy cumpliendo la palabra que te di cuando juréEscribirte una canción.
Un dios triste y envidioso nos castigó por trepar juntos el árbolY atracarnos con la flor de la pasión por probar, aquel sabor.

El agua apaga el fuego, y al ardor los años, Amor se llama el juego en el que un par de ciegos Juegan a hacerse daño, y cada vez peor y cada vez más rotos y cada vez más tu, y cada vez más yo Sin rastro de nosotros.
Ni inocentes ni culpables, corazones que destroza el temporal, carnes de cañón. No soy yo, ni tú, ni nadie son los dedos miserables que le dan Cuerda a este reloj. Y no hay lágrimas que valgan para volver a meternos en el coche Donde aquella noche en pleno carnaval te empecé a desnudar.

El agua apaga el fuego, y al ardor los años, Amor se llama el juego en el que un par de ciegos Juegan a hacerse daño, y cada vez peor y cada vez más rotos y cada vez más tu, y cada vez más yo sin rastro de nosotros.

J.S

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